Pero Vengo - Mario Benedetti


Más de una vez me siento expulsado y con ganas de volver al exilio que me expulsa y entonces me parece que ya no pertenezco a ningún sitio, a nadie.
¿Será un indicio de que nunca más
no ser un exiliado?
¿Qué aquí o allá o en cualquier parte
siempre habrá alguien que vigile y piense, éste a qué viene?
Y vengo sin embargo tal vez a compartir
cansancio y vértigo
desamparo y querencia
también a recibir mi cuota de rencores
mi reflexiva comisión de amor
en verdad a qué vengo
no lo sé con certeza
pero vengo.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Pero Vengo. Aún cuando tú no quieres. Aún cuando tú utilizas frases hechas, no por tí, si no por otras (personas) más honestas. Frases hechas por otras, pero para tí vacías de contenido, vacías de hechos...
Qué lección me vas dar a mi que vengo, aunque tú no quieras, incluso aunque yo no quiera. Esa lección es para el resto (de personas) que aún no ha visto lo vacío de tu presencia, de tus palabras, de tus acciones...
Ahora te digo, ¡pero vete!, vete a tu casa, a tus vacaciones libres de apuros, a tu trabajo libre de nada, a tu vida mentirosa e interesada (en nada)... ¡Vete!, vete y déjanos venir a los que venimos, aún, a veces sin quererlo, sólo porque es necesario, vete y déjanos estar a los ilusos que sí creemos en las frases, que sí afrontamos los hechos, aunque nos pese.
¡Vete!
-Ylienia-